Serie Figuraciones 1999
Serie realizada entre 1998 y 1999 correspondiente a la primera etapa de "Figuracions" y presentada en la Galería Josep Canals de Sant Cugat y posteriormente en la Galeria Magdalena Baixeras de Barcelona y en la Galería Arenas de Tudela (Navarra).
Joan Laborda, "Figuraciones"
Joan Laborda...es un ejemplo, impar, de un diseñador gráfico cuya pintura se desarrolla independiente y al margen de su tarea gráfica. Reciente su exposición en la Galería Canals de Sant Cugat, presenta ahora en Barcelona una quincena de obras significativas de su labor plástica.
El título "Figuraciones" no es suficientemente indicativo de sus planteamientos: figuración si, pero realizada a través de un elaborado trabajo de collage. El terroso color de sus composiciones sirve para mantener el anonimato de sus personajes que importan por lo que representan de prototipos genéricos.
Su trabajo entronca con los grandes creadores de imágenes a través de telas manipuladas y enganchadas, que se impusieron en los años 60.
Françesc Miralles, crítico de arte.
"La Vanguardia", octubre de 1999
Sobre las "Figuraciones" de Joan Laborda
...Los seres que habitan las obras de Joan Laborda están de paso en ellas.
Son tangibles, pero no eternos....La fugacidad de la existencia, el paso inexorable del tiempo -tan humano- , las prisas -más humanas aún- y la filosofía del "carpe diem". Todo este discurso está presente en la obra del Joan Laborda actual : el pasado no existe y el futuro... ¿llegará?. !Aprovecha, vive el momento presente!
Un artista. No un pintor. Un artista que sufre si no se entrega a la creación- Así es como se define el propio Laborda. Se declara admirador profundo de la obra de artistas tan geniales y tan distantes en el tiempo como en la ejecución y el sentimiento del Arte: Caravaggio, Velázquez, Kokoschka, Bacon....Quizás el verdadero talento consista en saber aprehender eclécticamente. Y si es así, Laborda sabe y posee...
Retrata "personalidades", no personas. Altamente matérico y plástico en sus resultados, Joan Laborda erige habitualmente en centro de sus composiciones al hombre. Personas reales -seres cercanos al artista-, en ocasiones; otras, anónimas, pero siempre esbozadas, no definidas. No le interesa la veracidad ni el realismo "per se", sinó la esencia, el concepto, el contenido.
Marién Rovalo, crítica de arte.
Revista "Artes Plásticas", julio 1999
